Los 4 consejos para manejar bajo la lluvia y evitar accidentes

De acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía e Informática, durante el 2021 se registraron a nivel nacional 969 siniestros causados por agentes naturales, de los cuales, 821 fueron provocados directamente por la lluvia.

Manejar bajo la lluvia puede ser peligroso debido a una serie de riesgos adicionales que se presentan en condiciones climáticas adversas. Algunos de los principales riesgos de conducir con lluvia incluyen:

1. Baja visibilidad: La lluvia reduce la visibilidad en la carretera, lo que dificulta ver otros vehículos, peatones, señales de tráfico y obstáculos en la vía.
2. Deslizamiento e hidroplaneo: Las carreteras mojadas pueden volverse resbaladizas, especialmente si la lluvia es intensa. El hidroplaneo ocurre cuando una capa de agua se forma entre los neumáticos del automóvil y el pavimento, lo que hace que pierdas el control del vehículo.
3. Distancias de frenado prolongadas: Los frenos pueden tardar más en responder en superficies mojadas, lo que aumenta la distancia necesaria para detener el vehículo.
4. Aquaplaning en curvas: Al tomar curvas a alta velocidad en carreteras mojadas, existe el riesgo de aquaplaning, donde los neumáticos pierden el contacto con la carretera y el vehículo se desliza.
5. Dificultad para mantener el control: La conducción bajo la lluvia puede ser más desafiante y agotadora, lo que podría afectar tu capacidad para mantener el control total del vehículo.
6. Salpicaduras de agua: Los vehículos que circulan a alta velocidad pueden arrojar agua, reduciendo aún más la visibilidad de los conductores que los siguen.
7. Inundaciones: En casos de lluvias intensas o torrenciales, algunas áreas pueden inundarse, lo que representa un riesgo significativo para los conductores y puede dañar el vehículo.
8. Fallas mecánicas: La lluvia puede afectar el funcionamiento de algunas partes del vehículo, como los frenos, las luces y los limpiaparabrisas, lo que puede aumentar el riesgo de accidentes.

Ante estas situaciones, es fundamental tomar precauciones adicionales al conducir bajo la lluvia:

• Reducir la velocidad: Conducir a velocidades más bajas permite una mejor respuesta de los frenos y un mayor control del vehículo.
• Aumentar la distancia de seguimiento: Mantener una distancia de seguimiento mayor con respecto al vehículo que está adelante te da más tiempo para reaccionar ante cualquier situación imprevista.
• Encender las luces: Las luces encendidas mejoran la visibilidad tanto para ti como para otros conductores.
• Usar los limpiaparabrisas adecuadamente: Mantén los limpiaparabrisas en buen estado y ajusta su velocidad según la intensidad de la lluvia.
• Evitar maniobras bruscas: Las maniobras rápidas pueden hacer que pierdas el control del vehículo en superficies mojadas.
• Mantener el control del volante: Sujeta firmemente el volante y evita giros bruscos.
• Tener cuidado en zonas inundadas: Evita conducir a través de áreas inundadas, ya que es difícil saber la profundidad del agua y puede dañar el vehículo o causar accidentes.

Recuerda que es crucial adaptar tu conducción a las condiciones climáticas y, si la lluvia es demasiado intensa o peligrosa, es mejor considerar postergar el viaje hasta que mejoren las condiciones climáticas.