Gobernador de Baja California se “Candidatea” para la SCT
La tragedia en la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México ha impactado en Palacio Nacional. Incluso, detonó la buena relación entre el Gobierno de la República y los empresarios encargados de las grandes obras de la Cuarta Transformación, como el Tren Maya a cargo de Carlos Slim.
Los hasta ahora dos titulares de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, ambos provenientes de Grupo Riobóo, el conglomerado de obras favorito de López Obrador, también comenzaron un proceso de análisis sobre la construcción de la conocida Línea Dorada bajo la administración de Marcelo Ebrard y reinaugurada tras peritajes de seguridad durante el gobierno de Miguel Ángel Mancera.
En particular así lo hace el secretario Jorge Arganis Díaz, cuya estabilidad quedó detonada al polemizar en público con las Fuerzas Armadas. Y a río revuelto, ganancia de pescadores. Al menos esto es lo que anunció el gobernador Jaime Bonilla a los operadores electorales que le reportan diario el estado de la campaña en Baja California.
Como pocos en las administraciones de los estados, Bonilla Valdez hizo suyo el apotegma de la 4T sobre separar el poder político del poder económico en la península norcaliforniana, bastión del panismo más empresarial. El caso más evidente de ello es el proceso de expropiación del Club Campestre por la situación legal del predio y, desde luego, la morosidad en el pago de impuestos del histórico sitio de Tijuana.
Tras ver sepultado su deseo de dirigir la Comisión Nacional del Agua (Conagua) con la llegada de Germán Martínez Santoyo hace un mes, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes sería la puerta que tanto ha buscado el gobernador de BC antes de entregar su cargo -según los sondeo más confiables- a Marina del Pilar. Antes había rechazado regresar a su escaño al Senado de la República.
Incluso estudió otras posibilidades para su futuro inmediato, siempre a nivel federal. Entre aquellos caminos contempló un escenario donde podría ser candidato a la alcaldía de Tijuana o superdelegado federal de los Programas del Bienestar. Esto último fue usado por la candidata de la alianza opositora, Lupita Jones, para atacarlo, motivo por el cual Jaime Bonilla respondió asegurando que se trataba de fake news.